Xcaret GRATIS.

En esta nueva entrada quiero platicar como fue que conseguí llegar a Xcaret gratis.  En realidad fue fortuito; yo no tenía ni la mas mínima intensión de  ir ya que es caro y en aquel proyecto que estaba haciendo en ese momento, no me estaban pagando muy bien, Además de que mi roomie no le estaban cayendo proyectos y yo tenia que hacerme cargo de la renta y los gastos del departamento en la Ciudad de México.

Justo en las fechas en que estábamos en Playa del Carmen se aproximaba el día de muertos  y nos habían dicho que en Xcaret ponían uno o varios altares de muerto muy bonitos y además que hacían un festival relacionado a esta celebración igual de bonito.

Así que una de mis compañeras de producción llamada Alejandra  se le ocurrió que quería ir, pero que no quería pagar todo lo que costaba. Fue entonces que ella decidió tomar una oferta que ofrecía un vendedor de paquetes vacacionales.

Lo único que teníamos que hacer según el vendedor era escuchar una platica de 90 minutos donde te intentaban convencer de que compraras un paquete vacacional y sólo por eso ya estas dentro.

A mi también me lo habían ofrecido cada vez que pasaba frente del modulo donde los vendedores que estaba justo en la Quinta Avenida, un lugar súper transitado por turistas. Pero siempre que me lo ofrecían decía que no y por lo tanto ni siquiera sabía de que se trataba.

Hasta que Alejandra me pidió que la acompañara y me explico la forma de entrar gratis al lugar. Pero aunque escuche la palabra gratis, ni así me convencían por que el requisito mas importante que nos piden es tener dos tarjetas de crédito y yo no las tengo; como decimos aquí en México a manera de sarcasmo, por exceso de pago (me retrase en varios pagos en las dos que tenía y me las quitaron).

Para no hacer el cuento largo, ella me dijo que prestaba una y que le pidiera la otra a Claudia, mi jefa.

Después Alejandra me dijo que el vendedor había conseguido que nos dieran la platica sólo con una tarjeta de debito y eso yo si lo tengo.

La cita era el domingo 30 de octubre a las 7 de la mañana enfrente del modulo de venta, así que allí nos quedamos de ver Ale y yo con el vendedor, pero ella llego antes y la subieron a un taxi sin que me esperaran.

Le marque a Alejandra por teléfono y ella me dijo que no me preocupara, que ya otro vendedor me iba a atender y que ya sabia mi caso. Así  que me acerque al modulo y les dije que quería mi platica para luego entrar Xcaret.  Pero resulta que no servía mi tarjeta de debito, que forzosamente necesitaban 2 tarjetas de crédito.

Obviamente le avise a Alejandra y le dije que ya no iba a ir porque me habían rechazado la tarjeta, ella me dijo que se la pidiera de nuevo a Claudia pero mi jefa ya había salido del hotel hacia Tulum. Recibí de nuevo la llamada de Alejandra y me dijo que el vendedor iba a tratar de ayudarme y que no me moviera de allí.

Frente al modulo había una cafetería, así que me fui a comprar un chai en lo que me resolvían, pero yo pensaba que ya no había nada que hacer. Y la verdad es que no me importaba tanto dejar de ir. Entonces me la lleve relax y espere.

Después de unos minutos el vendedor que me atendía  se acerco al café y me sugirió sacar una tarjeta digital, cosa que no pude, yo creo que por mi historial crediticio. El chico regreso al modulo y luego volvió conmigo y me pidió de nuevo mi tarjeta de debido.

Cuando abrí mi cartera él se dio cuenta que tenia dos tarjeta de crédito, una de Banamex y otra de American Express. Obvio pregunto que si esas tarjetas no servían y yo le dije que aunque la fecha seguía vigente ya no servían porque me las habían cancelado meses atrás por falta de pago.

El me dijo que eso no importaba porque ellos no la revisaban sólo la querían ver físicamente cuando llegara a las oficinas de Xcaret Que si tomaban el número, pero que no las revisaban en el sistema. Así que como tenía la platino de Amex pase sin ninguna dificultad.

La verdad no entiendo hasta el día de hoy por que no las había sacado de mi cartera si yo sabía que no servían ya, pero tal vez Dios, o el universo o quien controla este plano en donde estamos, sabía que algún día me iban a servir.

Volviendo al tema de Xcaret, llegue a las oficinas del parque me registraron y pase con el asesor que me designaron para que pudiéramos desayunar. Pero antes me mostro un poco el lugar y me platico de las maravillas que hay allí.

Recorrimos algunos pasillos, vimos las albercas y una habitación, según él una de las mas lujosas. Yo veía la reacción de los demás clientes que realmente se veían maravillados de ver tanto lujo y confort. Pero yo haciendo scouting, he visitado y fotografiado muchos sitios muy lujosos y confortables y no  me sorprendió demasiado.

Sin embargo, el desayuno estuvo excelente, desde allí me la empecé a pasar bien. El asesor me pregunto un poco de mi, del trabajo, mis gustos, etc.

Después me paso a una sala donde había varias mesas y en cada una de las mesas estaban sus clientes potenciales.

Obviamente yo sabía desde el principio que no les iba a comprar nada, por que no me interesaba y lo mas importante no tenía como pagarlo ya que los paquetes son muy caros.

No se lo dije, yo me mantuve atenta a lo que me decía y hasta a veces fingía que me emocionaba lo que el me estaba ofreciendo.

Cuando íbamos a la mitad de la platica me habla Alejandra y me dice muy enojada que no la dejaron entrar al parque por que ella cometió el error de decirle que ella estaba allí sólo por el acceso gratuito y que sólo los iba a aguantar los 90 minutos que el vendedor le dijo que duraba la platica.

Esto no creo que le haya agradado al asesor que a ella le toco. Entonces le dijo que el parque estaba muy lleno y que no la iban a dejar pasar. Ya no se si mi amiga acabo la platica o que paso, el chiste es que no puedo entrar al parque y al final termino yendo a Tulum con Claudia.

A mi me hablo para advertirme que si quería entrar que no dijera mis verdaderas intenciones. Sólo que yo desde antes de esa llamada, no pensaba decir nada y como escribí en párrafos anteriores, hasta fingí emoción.

Ya cuando llego la hora de que yo soltara mi tarjeta le revele que no quería comprar nada. Me trato de convencer, llamo a su jefa dos veces, pero no lo logro.

Yo no le di un no total, simplemente le dije que en ese preciso momento no podía porque necesitaba consultarlo con mi familia y fingí intentar hablar desde mi teléfono celular con mi mamá.

Cuando vieron que de plano no les iba a comprar nada, él y su jefa que por cierto se enojaron por que no pudieron realizar la venta conmigo, sólo atinaron a pasarme con otra chica para que me llevara a recoger mi pase al parque.

Una vez con mi pase en mano entre a Xcaret.

La verdad fue una de las cosas que mas me gusto hacer en ese proyecto, sin embargo ya lo viví y no creo volver a repetir. Prefiero gastar mi dinero en otras experiencia mas enriquecedoras para mi.

Como ya me extendí en esta entrada, en la próxima ahora si platicaré como fue mi experiencia dentro del parque y compartiré algunas fotos.